El pasado 11 de noviembre tuvimos el honor de rendir homenaje a quienes considero grandes amigos y maestros del tango: Don Juán Carlos Suárez y su esposa Alicia, que ya no está entre nosotros. Su contribución a la cultura argentina resulta de gran valor, no solo por ser testigos de la época dorada del tango, sino también por el espíritu de perseverancia que ellos representan. Es la historia de unos jóvenes que decidieron emigrar a Estados Unidos en la década de los 60’s, con las ilusiones y los desafíos propios de quienes han dejado su patria en búsqueda de nuevos horizontes. Una historia llena de aprendizajes, de amor y de superación, pues con su arte y tenacidad, lograron despertar el interés por el tango en otras culturas, siendo actualmente reconocidos como pioneros y fundadores académicos en suelo norteamericano. A la hermosa familia Suárez, le dedicamos esta emotiva improvisación junto a la actriz Ana Fontán, esperando que sus experiencias de vida sirvan como inspiración para las nuevas generaciones de artistas argentinos.